LA MATANZA: EL PRESIDENTE DEL PRO EN EL DISTRITO ALEJANDRO FINOCCHIARO PIDIÓ UNA VUELTA REAL A LA PRESENCIALIDAD EN LAS ESCUELAS
Es inconcebible que, después de un año y medio sin presencialidad, la provincia de Buenos Aires tenga cientos de escuelas que no pueden abrir por cuestiones de infraestructura”, criticó Finocchiaro
n momentos en que el Gobierno bonaerense evalúa poner en marcha clases a contra turno y los sábados para los alumnos que deban recuperar contenidos, el exministro de Educación nacional y candidato a diputado nacional por la Provincia en la lista que encabeza Diego Santilli, Alejandro Finocchiaro, se metió otra vez en el debate que fogoneó hacia mediados de 2020 sobre el regreso de los alumnos a las aulas. Ahora, en el inicio de la campaña electoral, el titular del PRO en La Matanza puso el foco de sus denuncias en las “persistentes dificultades de la Provincia para volver a la presencialidad escolar real”.
Mientras el año pasado se iba saliendo de la cuarentena de forma paulatina con protocolos para adaptarse a la “nueva normalidad”, fueron constantes los pronunciamientos a favor de la vuelta a clases presenciales por parte del exfuncionario de Cambiemos y titular de la Mesa Política de Juntos por el Cambio en La Matanza. Finocchiaro buscó reforzar su planteo junto al reclamo de la red Eco Educativo, un espacio de articulación que promovió a nivel nacional entre docentes, directivos, estudiantes, familias y ciudadanos de todo el país, para reclamar el regreso a las aulas por “el impacto social y psicológico” de la pandemia.
Ahora, con la presencialidad repuesta desde el 12 de julio, y lanzado hacia la campaña electoral, el líder del PRO local retomó uno de los mensajes que Santilli suele bajar en sus recorridas por el Conurbano para contrastar la decisión de la Provincia con el modelo porteño, que se adelantó a la presencialidad y entró en conflicto con el Gobierno nacional, que consideraba un riesgo mantener las clases en la segunda ola. En esa línea, Finocchiaro cuestionó el estado edilicio de las escuelas bonaerenses y las condiciones en que se dictan clases.
“Es inconcebible que, después de un año y medio sin presencialidad, la provincia de Buenos Aires tenga cientos de escuelas que no pueden abrir por cuestiones de infraestructura”, criticó y aseguró que “además, el problema tampoco se limita a las que mantienen las puertas cerradas”.
