jueves 25 de abril de 2024 23:35:09

La importancia del Juicio Oral

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El cliente no debe preocuparse si, durante algún segmento del juicio, el
abogado habla poco. Lo importante es que el abogado se mantenga atento y que no caiga en lagunas mentales que lo saquen del juicio

descarga (13)Para los abogados penalistas, el desafío profesional por excelencia es el
juicio oral. Allí se advierte a primera vista el calibre del abogado, sus
conocimientos y sus falencias. No hay juicio que no deje ningún
aprendizaje.

El cliente no debe preocuparse si, durante algún segmento del juicio, el
abogado habla poco. Lo importante  es que el abogado se mantenga atento y que no caiga en lagunas mentales que lo saquen del juicio.

Si el abogado sebe llevar el juicio, siempre podrá ejercer la defensa del
cliente de manera adecuada. Nadie le quitará la palabra cuando le asista
la razón.

Durante el juicio, el abogado debe ser amable y sincero. Debe obrar de
buena fe. La amabilidad no es sinónimo de debilidad, sido de ejercer el
derecho de defensa con caballerosidad, situación doblemente valorada por
los buenos jueces. Hay abogados que son especialistas en generar odios en
los juicios.

Nunca a través del odio se puede matar a la razón. Siempre es necesario
dar lo que un tiene de bueno, para recibir lo bueno que uno necesita.

Cuando el abogado es agresivo, y hasta pendenciero, y además no le asiste
la razón en lo que dice, es un mal abogado, y además una mala persona. Si
quiere comenzar con la alegría, pus comience ahora mismo, un hombre alegre
es siempre amable. Pero tenga presente que los tiempos alegres son los que
más rápido transcurren, por eso aprovéchelos.

Cuando el abogado actúa con decencia, aún cuando sus argumentos no son
jurídicamente muy válidos, se convierte en un profesional que trabaja con
decoro.

Los buenos jueces premian el decoro y la buena fe. Como todo en la vida, vio?

Siempre la buena fe y la decencia deben prevalecer por sobre los
conocimientos jurídicos del abogado. A los conocimientos jurídicos se los
encuentra en cualquier biblioteca.

En un cierto sentido, el mundo nos miente de manera constante. Nos muestra
que admira el dinero, dice que adora la fama y la celebridad. Pero la
verdad esto no es así.

El mundo admira y desea aferrarse a la bondad para no perderla. Admira la
virtud. Al final rinde su tributo más importante a la generosidad, la
honestidad, los principios, los valores y la misericordia, y por último
los talentos bien empleados.
Si usted es, o va en camino de ser un abogado penalista haga un empleo de
sus talentos de manera correcta.

Si usted es un potencial cliente y busca un abogado penalista, contrate a
uno que tenga la sana costumbre de ejercitar la decencia. Tendrá más
posibilidades de ganar su juicio, y piense que cuando su abogado se
jubile, todos deberán recordarlo por los ejemplos de decencia, que dejó, y
no por el dinero que ganó.

Decía casi al principio que escribía estas líneas en vísperas de la
Navidad. En éste años 2012, recién terminé de comprender que lo único
perdurable es el amor. Todo lo demás es sencillamente efímero.

También es sano y necesario ejercitar la costumbre pausada del perdón.
Pero antes del perdón, es preciso comprender la naturaleza del ser humano.
La comprensión evita la necesidad de perdonar. Comprender es más fácil que
perdonar. Aún así tenga fe en las bondades del perdón. Todo puede
corregirse, con un corazón bueno.

Un buen corazón es una riqueza que no se vende, ni se compra, pero se
regala. Solo debe utilizarse en calidad de obsequio.

El mundo actual esta caracterizado por la velocidad, la rapidez y la poca
o escasa felicidad. El poco tiempo, y las muchas cosas que hay que hacer,
y de los muchos compromisos que nos agobian. Pero hay que tener presente
que le ser humano es un profesional del pensamiento; lástima que haya
tantos profesionales que no ejerzan su profesión.

Siempre, en cada vida deberá haber una ilusión, y dos aspectos para
destacar, amor y decencia. En cada conversación sepa observar (y escuchar)
los silencios de su interlocutor, el silencio del envidioso está lleno de
ruidos. Ejercite el camino de la decencia, se sorprenderá. Una de las
cosas más bellas de nuestras vidas, es sorprendernos a nosotros mismos. Y
siempre tengamos en cuenta que el sufrimiento de muchos, puede ser
generado por la ambición y la avaricia de unos pocos.

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