POLÍTICA: EL ESTADO DE ALERTA EN LAS FILAS DEL PERONISMO HACE QUE SERGIO MASSA Y AXEL KICILLOF EL PRÒXIMO SÁBADO ENCABEZEN UNA CARAVANA AL ESTILO DUHALDE O MENEM EN LOS AÑOS 90
Sergio Massa fue a una reunión en el flamante búnker de la calle Mitre, en el centro porteño, y encabezó una cita con los intendentes de la primera y tercera sección electoral bonaerenses. La preocupación en las filas del peronismo está en cómo están hoy los números de la boleta presidencial en el distrito mayor del país, la provincia de Buenos Aires.
Massa estuvo frente a los intendentes de los distritos claves junto a Axel Kicillof y Máximo Carlos Kirchner, el gobernador que va por la reelección y el jefe de La Cámpora. El hijo de Cristina Kirchner tiene a sus principales hombres y mujeres de su agrupación política a tiempo completo en el búnker peronista de campaña.
Los últimos días estuvieron signados por la preocupación de la dirigencia de Unión por la Patria por los números en la Provincia. Los intendentes cuidan lo suyo y ven que la adhesión a Axel Kicillof para un nuevo mandato está en números parecidos. Pero la boleta presidencial (Sergio Massa-Agustín Rossi) no despega.
Sin saber si es porque no hay instalación aún de la nómina principal o porque no se ve allí una impronta que capitalice el voto habitual que arrastra CFK, la urgencia de UxP estará de cara a las PASO en mover el amperímetro en el conurbano, donde se da siempre para el peronismo la madre de todas las batallas.
Aparte, la disputa impensada que Sergio Massa debe llevar a cabo internamente con Juan Grabois, alteró los nervios de los dirigentes del Frente Renovador, la fuerza política massista.
Tras las críticas de Grabois a Massa por visitar la Sociedad Rural y fotografiarse amigablemente con sus dirigentes, el cuñado del ministro, Sebastián Galmarini, tuiteó de modo contundente: “Muchos ya no tenemos dudas que trabajás para que gane Juntos por el Cambio. No tenés ninguna chance de ganar, ni la PASO, ni mucho menos la elección general”.
Desde hace unos días el ministro dejó de enfocarse en el voto duro kirchnerista y empezó a buscar el voto de los desencantados. Pero la cita de este martes a la noche con los intendentes mostró el estado de alerta sobre la campaña en los distritos calientes del conurbano.
Así las cosas, Sergio Massa y Axel Kicillof encabezarán este sábado (entre las 13 y las 17 horas) una caravana, al estilo de las que Eduardo Duhalde y Carlos Menem llevaban adelante en esas tierras en los años ’90.
Kicillof tiene para esta semana, actividades en Chivilcoy, Moreno, Lomas, Escobar y ya agendada La Matanza, pero ahora, tendrá como compañero de cartel a Massa en el distrito más populoso de la Provincia.
En la reunión de este martes, nadie mencionó al Presidente de la Nación: Alberto no estuvo ni estará en estos actos que intentarán, cándidamente, mostrar a dirigentes fingiendo demencia sobre su pertenencia al gobierno del Frente de Todos. Paradojas de los tiempos electorales.